02 diciembre 2014

Charla con un investigador de ovnis de gran experiencia

Hace tiempo tuve la oportunidad de dialogar con un “gran investigador del fenómeno ovni” de gran experiencia, quien, al parecer no le gustó que un “simple reportero” le cuestionara sobre su trabajo y pusiera en duda su “gran experiencia, omitiré el nobre del sujeto para evitar suspicacias, aquí les reproduzco ese diálogo:

Él llega y me dice "Hola! Yo soy investigador del fenómeno ovni, he investigado muchos casos".
Y yo dije "¿En serio eres "investigador"? Entonces dime ¿cuántos casos has resuelto?"
Y él se quedó en un profundo y prolongado silencio, para luego responder “¿Cómo que cuántos casos he resuelto? ¿A qué te refieres con esa pregunta?”.
“A eso, a cuantos casos ha resuelto en su camino como investigador”, le dije.
Y de forma golpeada me respondió “¿Y tú quién eres para preguntarme a mi cuántos casos he resuelto? ¿Quién te crees? Yo tengo 30 años de experiencia en el campo de la ufología, he dado muchas conferencias y he viajado mucho, como para que tú me vengas a preguntar eso”
“Yo no me creo nada, soy un reportero que cubre la fuente, en este caso los temas de misterio, por lo tanto es mi obligación preguntarle ¿cuántos casos ha resuelto, ya que se dice ser investigador, ¿o me está queriendo engañar?”, le respondí.
Con aires de ofendido me contesta “Solo eres un simple reportero, no eres nadie para preguntarme eso y dudar de mi trayectoria”.
“Por lo mismo que soy reportero es mi deber preguntarle sobre la veracidad de su supuesta trayectoria, y su actitud me hace dudar mucho de ella, ¿esconde algo?” insistí en mi cuestionamiento.
Me dijo con ganas de cambiar de tema “Tengo cientos o miles de fotografías y videos, esas evidencias no la podrías negar, ni poner en duda, eso respalda mi trabajo”.
“De hecho, si me las permite, puedo demostrarle que muchas de ellas no son ovnis en ningún sentido, a menos que quiera cerrar mi mente a las explicaciones lógicas y racionales que dan solución a sus supuestos casos; sigue sin responderme ¿cuántos ha resuelto?” insistí en mi pregunta.  
Más ofuscado me responde “¿Quieres que te pase de mi material? Estás loco si crees eso, consigue el tuyo tú mismo”.
“Yo tengo mis propios casos, por llamarles de alguna forma, yo doy noticias pero conozco del oficio, y sin autonombrarme investigador he resuelto la mayoría de ellos, digamos que el 85%; ¿qué porcentaje de sus casos ha resuelto? Y como investigador que se dice ser ¿permitiría que otros revisaran sus resultados? Yo sí le presto los míos para que pueda verificarlos y comparar notas”, le dije sin titubear.
Sorprendido me dijo “Bueno, yo no he resuelto tantos, verás, el fenómeno extraterrestre es muy difícil tratarlo y sus pocas evidencias no convencen a muchos”.
“Usted ya me está diciendo que son extraterrestres, pero no tiene evidencias corroborables de ello, entonces ¿está especulando o mintiendo?” le respondí.
Ya algo falto de ganas y molesto me dice “¿Y cómo es que llegamos a esto?.
“Usted se me acercó a mi porque quería que yo lo entrevistara, ya que usted quería salir en el noticiero, pero sabe, a mi no me gusta perder el tiempo ni que me quieran engañar, adiós”. Me di la media vuelta y me fui a otro lado. 

https://twitter.com/belduque

2 comentarios:

Rolando Amaya dijo...

fantasías de un tirado a reportero, si ellos, por hacerse notar inventan cosas y las hacen realidad, como por ejemplo este cuento, los reporteros, deben decir la fuente no engañar diciendo, no diré el nombre por tal o cual razón, desde ya es mentira lo del dizque reportero

















































































































































































































































































Belduque dijo...

Por lo que se ve ya salió uno que se sintió aludido, sin ser el referido en dicho relato. ¿Se sentirá identificado con el relato? Es muy su problema. Les invito a hacer un ejercicio de honestidad, si no es muy difícil para ustedes. Dejemos de venerar mitos falsos.