En varias partes del mundo se ha dado el surgimiento de personas que se han autonombrado "ufólogos", estas personas que se deberían de dedicar a la investigación del fenómeno ovni, a buscar pruebas reales y verificables de este fenómeno para que cada día se más y mejor aceptado por la comunidad científica y la comunidad en general, se ponen a contemplar y hasta a alabar todo lo relacionado al tema ovni, y más si es favorable a la llamada hipótesis extraterrestre, aunque no tenga las más mínimas bases de realidad.
Parecen lo mismo, pero no lo son. Los ufólatras son los que adoran y veneran todo lo relacionado con los ovnis y con los, según ellos, "Maestros cósmicos", o sea a los "extraterrestres". Inventan supuestos contactos y algunos hasta aseguran poder canalizar mensajes de los "hermanos mayores estelares", uno de tantos nombres que ellos les dan. Hasta el momento no han podido comprobar que algo de lo que ellos dicen sea real o que tenga lo más mínimo de veracidad, pero muchos de ellos siguen tratan de seguir las "enseñanzas" de "pleyadianos", "arcturianos", de las Gaminedes y de cuanto sistema planetario se les ocurra.
Uno de los mayores fraudes esbozados por los ufólatras es la llamada "Confederación Galáctica" o "Federación Galáctica", una supuesta organización de civilizaciones extraterrestres que se comunica a travez de "canalizadores" y "contactados" quienes se encargan de promulgar sus doctrinas en cuanto medio de comunicación tengan acceso. Casi siempre sus supuestos mensajes hablan sobre catastrofes naturales, sobre el "fin del mundo", ecología, salvación de la humanidad y evolución espiritual, aunque después de analizarlos uno se da cuenta de que en su gran mayoría no tienen nada que ver con la realidad y no dejan de ser simples invenciones para ganar seguidores. Y no faltará el charlatán (Definición: "el que habla mucho y sin sentido") que alegue que la Estrella de la Navidad y la Nube de la Resurrección eran en realidad ovnis, que Jesús era extraterrestre, y otras cosas más, echando a la basura toda lógica, razón, objetividad y seriedad; pero a final de cuentas eso es lo que menos les interesa, solo buscan llamar la atención a como de lugar.
Los ufófilos son todas aquellas personas que son fanáticas y apasionadas por el tema ovni, y que sin razonarlo aceptan toda parafernalia relacionada con el fenómeno ovni sin hacer el más minimo análisis de su trasfondo. En muchos casos estos ufófilos se autonombran ufólogos, ya que según ellos "estudian e investigan" el fenómeno ovni, razón por la cual este termino ha caido casi en desuso entre los investigadores formales del fenómeno, quienes ahora prefieren ser llamados investigadores del fenómeno ovni para no ser confundidos con los ufófilos.
Por lo general los ufófilos tienden a ser más agresivos en su forma de actuar, ya que atacarán y criticarán fuertemente a cuanta persona cuestione sus ideologías e hipótesis, y las defenderán a capa y espada aunque, en muchos casos, ellos mismos saben que lo que defienden no tiene ninguna base real. Tacharán de ignorante y mente cerrada a cuanta persona solicite pruebas verificables de lo que ellos expongan como tajantemente real, y con mucha facilidad inventan adjetivos para nombrar a cuanta persona no tenga sus mismas afiliaciones ideológicas. En más de un caso realizaran fraudes e inventarán casos de avistamientos para intentar dar mayor peso y veracidad a sus afirmaciones, pero esto en lugar de reforzar lo que dicen lo termina por descalificar.
Continuará...
Parecen lo mismo, pero no lo son. Los ufólatras son los que adoran y veneran todo lo relacionado con los ovnis y con los, según ellos, "Maestros cósmicos", o sea a los "extraterrestres". Inventan supuestos contactos y algunos hasta aseguran poder canalizar mensajes de los "hermanos mayores estelares", uno de tantos nombres que ellos les dan. Hasta el momento no han podido comprobar que algo de lo que ellos dicen sea real o que tenga lo más mínimo de veracidad, pero muchos de ellos siguen tratan de seguir las "enseñanzas" de "pleyadianos", "arcturianos", de las Gaminedes y de cuanto sistema planetario se les ocurra.
Uno de los mayores fraudes esbozados por los ufólatras es la llamada "Confederación Galáctica" o "Federación Galáctica", una supuesta organización de civilizaciones extraterrestres que se comunica a travez de "canalizadores" y "contactados" quienes se encargan de promulgar sus doctrinas en cuanto medio de comunicación tengan acceso. Casi siempre sus supuestos mensajes hablan sobre catastrofes naturales, sobre el "fin del mundo", ecología, salvación de la humanidad y evolución espiritual, aunque después de analizarlos uno se da cuenta de que en su gran mayoría no tienen nada que ver con la realidad y no dejan de ser simples invenciones para ganar seguidores. Y no faltará el charlatán (Definición: "el que habla mucho y sin sentido") que alegue que la Estrella de la Navidad y la Nube de la Resurrección eran en realidad ovnis, que Jesús era extraterrestre, y otras cosas más, echando a la basura toda lógica, razón, objetividad y seriedad; pero a final de cuentas eso es lo que menos les interesa, solo buscan llamar la atención a como de lugar.
Los ufófilos son todas aquellas personas que son fanáticas y apasionadas por el tema ovni, y que sin razonarlo aceptan toda parafernalia relacionada con el fenómeno ovni sin hacer el más minimo análisis de su trasfondo. En muchos casos estos ufófilos se autonombran ufólogos, ya que según ellos "estudian e investigan" el fenómeno ovni, razón por la cual este termino ha caido casi en desuso entre los investigadores formales del fenómeno, quienes ahora prefieren ser llamados investigadores del fenómeno ovni para no ser confundidos con los ufófilos.
Por lo general los ufófilos tienden a ser más agresivos en su forma de actuar, ya que atacarán y criticarán fuertemente a cuanta persona cuestione sus ideologías e hipótesis, y las defenderán a capa y espada aunque, en muchos casos, ellos mismos saben que lo que defienden no tiene ninguna base real. Tacharán de ignorante y mente cerrada a cuanta persona solicite pruebas verificables de lo que ellos expongan como tajantemente real, y con mucha facilidad inventan adjetivos para nombrar a cuanta persona no tenga sus mismas afiliaciones ideológicas. En más de un caso realizaran fraudes e inventarán casos de avistamientos para intentar dar mayor peso y veracidad a sus afirmaciones, pero esto en lugar de reforzar lo que dicen lo termina por descalificar.
Continuará...
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